jueves, 11 de marzo de 2010

Hoy también es jueves...

... como lo fue el 11 de marzo de 2004, cuando fuimos todos golpeados en lo más hondo, del modo más cruel.
¿Por quién? No se sabe, ni se quiere saber. Hay muchos que piensan que nunca se sabrá, porque quizás hubo y hay implicaciones que nos llevarían al total y absoluto estupor.
La mascarada del juicio en el que se nos quiso convencer de que se averiguó la verdad no es más que una tapadera, y si no hay alguna investigación periodística que se escape al férreo control de los poderes, se quedará en la penumbra... Para siempre. Si Don José Luis Rodríguez Zapatero sigue en el poder, ya se sabe lo que pasará; si por casualidad otro u otra ocupara su lugar, hará lo mismo: inocular dosis altas de olvidina.

La reacción que hubo después culpando al gobierno de entonces de los muertos y de los heridos en razón del apoyo político que España a la invasión de Irak supuso la forma en que se puso de rodillas a la sociedad española.

Se quiso acabar con el gobierno de la derecha en España... y se logró. Con ello nos llegó Don José Luis y su Alianza de Civilizaciones, su pose antiamericana y su proyecto de cambio social para nuestro país.

Me gustaría formar parte de una sociedad que cuando fue golpeada en su corazón en el momento más delicado -vísperas de unas Elecciones Generales- hubera sabido reaccionar con valor, afrontando el verdadero reto, no pensando que si al matón de la clase le haces la pelota -y todos saben que el verdadero matón no era Bush sino el terrorismo islamista- te va a dejar en paz... No lo hago, pues muchos de por aquí han preferido pasar una página que si tuviéramos algo de coraje no podríamos pasar hasta que quede completamente escrita.

NO ESTÁ ZANJADO. QUEREMOS SABER LA VERDAD.

Que Dios Todopoderoso dé valor, esperanza y vida eterna a las víctimas directas, las que encarnaron dolorosamente en su día a todos los españoles.

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