martes, 30 de marzo de 2010

No está escrita


Me gustó mucho esta frase cuando la leí trabajando en los textos del que nos dejó hace ya casi 5 años, Juan Pablo II:
"La historia no es simplemente un proceso necesario hacia lo mejor, sino más bien un acontecimiento de libertad, más aún, un combate entre libertades."

No se trata de una gran definición, sino de una forma de subrayar una situación que tiene la familia en nuestra coyuntura cultural. Se puede encontrar en la exhortación apostólica Familiaris Consortio, en su secuencia 6.

Pero muestra algo de lo que deberíamos persuadirnos. La historia de la humanidad, la historia de cada uno de nosotros por tanto, no está escrita, no está ya determinada. Somos nosotros mismos, los hombres, quienes vamos tejiendo la trama con nuestros hechos. La tejen los que prefieren inmolarse rodeados de explosivos y la tejen quienes saben cómo mantener la esperanza y el amor a lo largo de toda una vida. La mayoría estamos como a medias, buscando nuestro lugar.

Todo está en nuego de lo que seamos capaces de hacer. La historia camina siempre hacia delante, y no deja de proponernos el reto de ser lo suficientemente audaces para ir dando pasos para descubrir quiénes somos...

PD. Por eso me desazona tanto el encuentro con posturas que en el fondo desconfían de que podamos encontrar la verdad; sin ella la libertad no es sino la de la hoja caída, la que solo parece volar, pues en el fondo la llevan los vientos del momento hasta que termina pudriéndose.

No hay comentarios: